Un sábado muy ambientado

En la entrada de hoy les platicaré un poco sobre mi fin de semana. Bueno, específicamente sobre lo que hice el día  de ayer (sábado).

Pues bien, como forma de reducir un poco el estrés que nos genera el final de semestre, amigos y yo decidimos ir a darnos una vuelta por las trajineras ya entrado el medio día, ahí pasamos unas agradables horas conviviendo sanamente, ya saben, amenizando el momento con música y  pura agua de sabor ☺.

Una vez terminado nuestro recorrido en trajinera, nos dispusimos a visitar un parque cercano al Parque Ecológico de Xochimilco, donde intentamos mejorar nuestra condición física rentando una pequeña lancha para conducirla remando, actividad con la cual entendí  lo difícil que es el trabajo de los que conducen las trajineras☺. En fin, después de pasar varias horas disfrutando de Xochimilco, concluyó nuestra salida.

Sin embargo, cuando supuse que llegaría a mi casa a tirarme descaradamente a ver la televisión, me encontré con la noticia que iríamos a cenar a la casa de una tía en el Ajusco con motivo de celebrar el cumpleaños de uno de mis primos, así mi familia y yo nos dirigimos a unirnos al festejo.  A pesar de que el festejo prometía prolongarse hasta tarde, nuestra presencia en la reunión no duró mucho ya que nos fuimos de la casa de mi tía como a la 11 de la noche.

Esa reunión parecía el cierre de ese día tan movido, pero cuál fue mi sorpresa que al regresar de la casa de mi tía, nos encontramos a nuestros vecinos, los cuales, nos invitaron muy amablemente a su fiesta en la que celebraban el cumpleaños de una de sus hijas, y como nuestros vecinos son ampliamente conocidos en la cuadra por sus fiestas, ya que en cada una de ellas contratan una Banda o un Grupo Norteño, pues, decidimos asistir.

De esta forma,  después de  haber pasado un buen rato y en punto de las 4 am, justo cuando la Banda dejó de tocar, se acabó mi  ambientado  día sábado, que claro está, ya era domingo ☺.

No cabe duda que este fin de semana  me ayudó a eliminar el estrés de final de semestre, ojalá todos mis sábados fueran igual, así yo no tendría ninguna queja. Hasta iría con más gusto a la escuela ☺.